La importancia del almacenamiento adecuado de leña


La madera es una fuente de energía limpia y renovable y no hay nada más reconfortante que un fuego acogedor en las noches frías de invierno; apropiado almacenamiento de leña es importante si se evitan los humos nocivos de la madera que se quema gravemente (que puede causar mala salud y contaminación del aire). Hay algunas reglas que deben seguirse para que la madera recién cortada se trate de la manera correcta para una quemadura realmente limpia.

Madera sazonada

La madera almacena agua, por lo que es importante que tan pronto como se corte, se corte en troncos pequeños y se divida para que el agua se evapore rápidamente. Los troncos secos se queman más eficientemente y producen un humo mínimo. Si compra madera, siempre pregunte si está sazonada y qué tipo de madera es. Esto se debe a que la madera dura, como el roble o el nogal, se quema mejor que otros tipos, lo que proporciona mucho calor, luz y duración. Para que la madera esté completamente sazonada, puede tomar desde unos pocos meses hasta un año. Invertir en un lector de humedad de madera es sabio, ya que indicará cuándo la madera está lista para su uso porque, por otro lado, la madera que está demasiado seca se quemará demasiado rápido.

Almacenando la madera

Después de cortar, la madera debe mantenerse en un lugar seco. Es posible que tenga que colocar un cobertizo pequeño para este propósito o encontrar un espacio para él en el sótano. Si el lugar que elija es propenso a la humedad, cubra la madera para preservarla. Antes de almacenarlo, exponga la madera al sol para darle una ventaja en el proceso de secado y evitar que se pudra. Asegúrese de que el lugar donde lo almacena tenga suficiente circulación de aire, así que no cubra la madera con demasiada fuerza e inspeccione el lugar regularmente para detectar posibles daños. Apile la madera de manera uniforme, ya sea horizontal o vertical en filas paralelas con un poco de espacio intermedio para la circulación de aire.

Almacenando dentro de la casa

Es una buena idea almacenar algo de madera en un estante dentro de la casa, cerca de la chimenea, pero con la distancia suficiente para evitar que las chispas lleguen a los troncos. Es útil tener la madera allí porque no tendrá que salir cada vez que necesite avivar el fuego y la madera apilada se secará aún más en la temperatura cálida. Apílelo sin apretar para permitir que el aire circule. La circulación de aire es muy importante porque la falta de aire producirá insectos y parásitos en la madera.

Consejos rápidos

      Al comprar madera, inspeccione los troncos en busca de moho o cualquier otro signo de enfermedad. Asegúrese de que los bastidores que utilizará estén construidos con la fuerza suficiente para soportar la madera pesada, de modo que no se produzcan accidentes, como la caída de troncos en el pie de alguien, lo que puede ser muy desagradable. Los bastidores ligeros pero resistentes hechos de acero tubular están disponibles en varios tamaños.

        También es una buena idea tener un extintor de incendios en la casa en caso de que ocurra algo inoportuno.