Pintura interior Cómo elegir el blanco correcto


La pintura blanca es a la vez una de las elecciones más populares de color de pintura para paredes interiores y una de las más complicadas de elegir. Una gran pintura blanca puede realmente transformar el ambiente de una habitación y hacer que se sienta suave o estimulante, dependiendo del tipo de tono utilizado. Sin embargo, encontrar esa pintura blanca perfecta no es tan fácil como parece dada la variedad de tonalidades que están disponibles en blanco. Con eso en mente, hay varios factores a considerar antes de elegir el blanco perfecto para su espacio interior.

Explora las variaciones blancas

Créalo o no, hay cientos de diferentes tonos de blanco en el mercado. Estas variaciones a menudo no se notan hasta que se comparan directamente con otros tonos, pero cuando se comparan las diferencias se ven fácilmente. Las tonalidades cálidas de color blanco tienen un poco de color amarillo, óxido, rosa o marrón mezclado y tienden a generar una sensación más suave en una habitación. Mientras tanto, los blancos más fríos tienen tonos de azul, verde o gris mezclados y tienden a ofrecer un aspecto y sensación más audaces y audaces.

Crear una comparación de prueba

Teniendo en cuenta todos estos factores, asegúrese de hacer algunas pruebas antes de elegir un blanco y comenzar a volver a pintar su espacio. Una simple prueba de color ayudará a garantizar que el color se vea tan bien en la pared como en el papel. Una manera fácil de hacerlo es pintar un cuadrado de 1x1 pies de al menos tres tonos diferentes de blanco en varios puntos de la pared. Después de pintar algunos abrigos, examine los puntos de prueba en el transcurso de unos días en diferentes momentos para tener una buena idea de cómo los cambios en la luz afectan el color. Una vez hecho esto, y después de tener todo en cuenta, debe tener una buena idea de qué color de blanco se adapta mejor a la habitación.

Estado de ánimo: ¿Cómo quieres sentirte?

Una cosa a tener en cuenta al elegir un tono de blanco con el que desea pintar es determinar el objetivo principal de la sala. ¿Se supone que la sala es un espacio suave o estimulante? Si la habitación está destinada a ofrecer relajación a los invitados, considere un blanco más suave. Un blanco suave puede suavizar la apariencia de una habitación y es ideal para leer espacios o salas de estar. Si el espacio está destinado a ser más emocionante y animado, como una cocina, entonces elija un blanco más brillante que tiende a crear un espacio más audaz, especialmente cuando se combina con otros colores.

Luz natural: comparación y contraste

Otra cosa a considerar es la cantidad de luz natural que recibe la habitación durante el día. Si el espacio recibe una gran cantidad de luz natural, se puede utilizar un blanco más frío sin sacrificar la calidez. En contraste, si la habitación no tiene el lujo de la luz natural, entonces un tono más cálido de blanco es más apropiado para usar porque un blanco más brillante tiende a desprenderse como frío en espacios poco iluminados. Tenga en cuenta que la luz natural varía según la hora del día, por lo que un blanco puede verse bien durante un día brillante y soleado, pero no tan bueno durante la noche.

Muebles existentes: ¿Con qué estás trabajando?

Algo que a menudo se pasa por alto cuando se pinta un cuarto un nuevo color es el tono de los muebles existentes en la habitación. Dado que los blancos se componen de una variedad de matices diferentes, el color de los muebles tiende a exagerar estos tonos y hacerlos más pronunciados. Por ejemplo, si tiene un sofá con almohadas rosas, entonces el blanco que usa para pintar las paredes puede parecer de un tono rosado en lugar de blanco puro. Tenga esto en cuenta ya que algunos colores de blanco no se combinan bien e incluso pueden ensuciar el espacio. Además, no te olvides de los suelos y asegúrate de que los colores que elijas complementen los muebles en lugar de trabajar contra ellos.

No te olvides de los techos

Una vez que se haya decidido por la pintura blanca perfecta para su habitación, no se olvide de los techos. Los techos de una habitación a menudo se pasan por alto a pesar de su importancia. El blanco perfecto en el techo puede atraer los ojos hacia arriba y hacer que un espacio parezca más alto de lo que realmente es, e incluso puede usarse para acentuar el color blanco que eligió para las paredes. Por lo general, es una buena idea usar un blanco puro en los espacios elevados, ya que es más neutral que otros tonos y hace un buen trabajo para atraer la atención hacia arriba sin atraer demasiada atención.